Se trata de la cuarta jornada, antes de que los acusados sean trasladados a la Unidad Nº 6 de Dolores. Siete detenidos ya fueron identificados.
Los acusados por el crimen de Fernando Báez Sosa, el joven asesinado a la salida de un boliche en Villa Gesell, serán sometidos a la cuarta y última rueda de reconocimiento. De acuerdo a los testimonios de los testigos recabados hasta el momento siete de los diez rugbiers detenidos fueron identificados. Una vez finalizada la rueda de reconocimiento, los acusados serán trasladados a la Unidad Nº6 de Dolores, donde estarán aislados del resto de los reclusos.
Al igual que en las jornadas anteriores, esta prueba se realiza en la Secretaría de Seguridad de Villa Gesell desde las 8.30, y participarán cuatro testigos.
Los diez arrestados están imputados por el delito de «homicidio agravado por el concurso premeditado de dos o más personas» por el crimen de Fernando Báez Sosa que ocurrió en la madrugada del sábado 18 de enero último, frente al boliche «Le Brique». A su vez, en la rueda también participa Pablo Ventura, el joven que estuvo preso y luego fue liberado, quien en ninguna de las instancias fue reconocido por testigos, razón por la que su abogado Jorge Santoro pidió su sobreseimiento.
Según el resultado que arrojaron las anteriores ruedas de reconocimiento Maximiliano Thomsen y Ciro Petorssi serían señalados como «coautores» y el resto como «partícipes necesarios».
Además, en la penúltima jornada, Luciano Pertossi (18) también fue identificado como uno de los agresores que golpeaba a puñetazos a Báez Sosa (19) afuera del boliche «Le Brique». También Ayrton Viollaz (20) fue marcado como quien «arengaba» el ataque en la vía pública; en tanto a Matías Benicelli (20), solo un testigo lo identificó como parte del grupo aunque no le asignó un rol específico en la golpiza.
De tal forma, hay tres que aún no fueron identificados en ninguno de los tres procedimientos realizados hasta ahora, ellos son, Alejo Milanesi (20), Blas Cinalli (18) y Juan Pedro Guarino (19).
Por otra parte, este lunes comenzó el peritaje a los 11 teléfonos celulares secuestrados de los imputados en la Agencia Regional de la Policía Federal Argentina (PFA), con el objetivo de analizar su contenido. Además, en el transcurso de estos días en Dolores se realizará el peritaje químico y de rastros para determinar si en las prendas y calzados incautados hay manchas de sangre.
No obstante, el peritaje scopométrico que va a comparar la «impronta» que dejó en la piel de la víctima una zapatilla, cuyo «modelo y tipo» fue identificado por la Policía de Tierra del Fuego, con el calzado incautado, también es una de las pruebas determinantes para la investigación, aunque aún no hay fecha de realización.