Miles de años hacen ya que los seres humanos hacemos uso (y disfrutamos) del efecto que produce el cannabis. Pero la polémica alrededor de esta droga dificultó —y lo sigue haciendo todavía en muchos lugares— que los científicos descubran sus orígenes genéticos. ¿De dónde vino el cannabis y cómo evolucionó hasta convertirse en ese verde potente que nos brinda placer?
Una nueva investigación publicada en la revista Science Advances utilizó la genética para rastrear el antiguo lugar de origen de Cannabis sativa, de la que cosechamos marihuana hoy. Es un estudio importante porque da un primer paso relevante para rastrear los orígenes evolutivos del cannabis moderno, especialmente en un momento en el que muchos países están reconsiderando si legalizar o no la droga.
Para conocer la evolución del cannabis y cómo la marihuana se separó de su pariente más cercano, el cáñamo, la variedad que casi no posee compuesto psicoactivo; los investigadores estudiaron 110 genomas de Cannabis sativa utilizando análisis moleculares y «secuenciación de ADN de próxima generación», técnicas que permiten conocer detalles del material genético que conforma a un organismo (en este caso, la planta).
A partir de esa información, pudieron reconstruir las relaciones y la evolución de cuatro grupos genéticamente distintos de cannabis:
- Cannabis «basal»: es el grupo «hermano» de todas las demás categorías de cannabis, incluido el cáñamo y el cannabis psicoactivo del mundo. Incluye plantas silvestres e híbridos de cannabis tradicionales, conocidos como «variedades locales», que se encuentran en la China moderna.
- Cáñamo : este grupo incluye todas las variedades de cáñamo de todo el mundo. El cáñamo es una variedad de Cannabis sativa y se distingue de otras variedades de cannabis por sus niveles más bajos de tetrahidrocannabinol (THC), el ingrediente psicoactivo que hace que el cannabis sea una droga tan potente. El cáñamo, a diferencia de su contraparte psicoactiva, no se suele considerar una droga y se usaba tradicionalmente para fabricar fibra para la ropa y otros materiales.
- El primer grupo de «droga» cannabis: este grupo incluye cepas silvestres de cannabis con propiedades similares a la marihuana de China, India y Pakistán, así como una variedad de cannabis cultivada en la India.
- El segundo grupo de «droga» cannabis: este grupo incluye variedades de cannabis con propiedades psicoctivas que se han cultivado en todo el mundo.
El primero de ellos, el cannabis basal, no solo no se había detectado en investigaciones anteriores sino que, a partir del mismo, los científicos aprendieron que el origen del cannabis cultivado o «domesticado» se remonta al este de Asia, incluidas partes de la China actual; en contraste a investigaciones anteriores que afirman que el cannabis cultivado se originó en Asia Central.
También encontraron que la división entre el cannabis basal antiguo y el cannabis cultivado moderno se produjo hace aproximadamente 12.000 años, colocando al cannabis en las distinguidas categorías de una de los primeras plantas cultivadas de la Tierra.
Por otra parte, los investigadores sostienen que el cannabis psicoactivo se extendió desde el este de Asia a la India hace unos 3000 años. En los últimos mil años llegó a América Latina y África, aunque no llegó a América del Norte hasta mucho más recientemente, a principios del siglo XX.
Su conclusión es que el cannabis probablemente se usó como un cultivo «multipropósito», no solo como una droga recreativa, durante miles de años en el este de Asia antes de que los humanos usaran la variedad cargada de THC que conocemos hoy.
Incluso creen que el cultivo humano de cannabis tuvo un efecto tan fuerte en su evolución genética que los ancestros salvajes puros de cannabis sativa podrían haberse extinguido.