El Sumo Pontífice se sometió a un análisis por COVID-19 ante el resfrío que padece desde hace algunos días. La enfermedad ya causó 52 muertes en Italia.
El papa Francisco dio negativo a la prueba de coronavirus a la que fue sometido por precaución en su residencia del Vaticano, debido a que sufre desde hace algunos días un resfriado, informó este martes el diario «Il Messaggero».
Anteayer, el mismo Francisco anunció durante el rezo del Ángelus que no participaría en los ejercicios espirituales de Cuaresma, los que habitualmente realiza con miembros de la Curia Romana por su estado de salud.
El Papa apareció en la audiencia del pasado miércoles ya algo resfriado y, por la tarde, celebró la misa para la imposición de la ceniza y la tradicional procesión desde la basílica de Santa Sabina a la Iglesia romana de San Anselmo, en la colina romana del Aventino.
Pero al día siguiente optó por permanecer en su Residencia de Santa Marta, en lugar de acudir a la liturgia penitencial con el clero de Roma en la basílica de San Juan de Letrán.
El viernes y el sábado, Francisco celebró la misa matutina en Santa Marta, pero canceló sus audiencias privadas previstas con participantes en un congreso en el Vaticano y miembros de los Legionarios de Cristo, entre otros.
Según fuentes oficiales, el coronavirus ya causó hasta ahora 52 muertos en Italia, todos ellos ancianos con otras graves patologías, y los contagiados ascienden a 2.036.
Esta situación provocó que haya descendido considerablemente el turismo como se puede apreciar también en la Ciudad del Vaticano, donde desaparecieron las colas para entrar en la basílica de San Pedro o en los Museos Vaticanos, con una reducción que ronda el 60%.